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Iñigo Beguiristain e Iñaki Bergera | Finalistas de los premios Saloni de arquitectura | "Nuestra mayor satisfacción es la de los clientes y usuarios"El estudio navarro de arquitectura Iñigo Beguiristain + Iñaki Bergera ha logrado ser finalista en la décima edición de los Premios Saloni, galardón que reconoce el diseño y creación de obras arquitectónicas e interiorismo
Noelia Gorbea | Diario de Navarra, 2010-08-12
Reducir la sensación de profundidad, eliminar los rincones ocultos y resolver las diferencias entre las distintas cotas para reordenar los espacios de un portal de la avenida Pío XII de Pamplona fueron las ideas que han llevado a los arquitectos Iñigo Beriguistáin e Iñaki Bergera, ambos de 38 años, a ser finalistas en la X edición de los Premios Saloni de este sector.
¿Qué les ha supuesto lograr un reconocimiento de este tipo?
La satisfacción fundamental es la de los clientes y usuarios de los proyectos, pero el recibir un reconocimiento prestigioso como el Saloni es es, a día de hoy, una de las pocas recompensas que puede otorgar un ejercicio profesional tan complejo y exigente.
¿Por qué decidieron presentarse al concurso?
Estábamos satisfechos con el trabajo realizado y entendíamos que podía atraer al jurado. El objeto del proyecto, un portal, es un tema singular y de interés.
Pero éste no es el único premio que han recibido. ¿Cuál ha sido su trayectoria?
En 2006 recibimos el premio de Interiorismo por una exposición en las arquerías de Nuevos Ministerios en Madrid y en la edición del año pasado fuimos también finalistas con el local Top Outlet que está aquí en Pamplona y que acaba de recibir también el Premio de Interiorismo del Colegio de Arquitectos. Recientemente, el portal ha sido designado como uno de los cuatro proyectos finalistas en la última convocatoria de los prestigiosos premios FAD. El fallo definitivo se producirá en octubre.
Dentro de la variedad de proyectos realizados, la accesibilidad es un tema muy presente. Aunque sea costoso, ¿pueden adaptarse todas las edificaciones ya levantadas?
En lo que se refiere al coste, es una cuestión de proporcionalidad. Hay situaciones ciertamente comprometidas en las que no parece razonable o no es posible destinar recursos ilimitados para resolver la accesibilidad. Por otro lado, la adaptación puede, en ocasiones, entrar en conflicto con los derechos de propiedad.
¿Cuáles son las mayores dificultades con las que se han encontrado?
Los proyectos de rehabilitación de viviendas y, particularmente, los que tienen que ver con la eliminación de barreras en los accesos son siempre proyectos complejos. Es un encaje de bolillos, que a veces se resuelve en cuestión de unos pocos centímetros.
Con su experiencia, ¿dirían que Pamplona es una ciudad adaptada?
Consideramos que es una ciudad razonablemente adaptada. No obstante, es un tema difícil apreciar si no se padece ninguna minusvalía. De hecho, es muy posible que las personas con movilidad reducida no tengan la misma percepción.
¿Creen que es necesaria una labor de sensibilización en los futuros arquitectos en la importancia de crear edificios sin barreras arquitectónicas?
Creemos que no es un problema de sensibilización. Hace años, la existencia de altillos, desniveles intermedios, rehundidos en los pisos, etc., unidos por escaleras, eran situaciones que implicaban conceptualmente una mayor riqueza espacial y, por tanto, arquitectónica. Hoy, el reto está en conseguir ese mismo virtuosismo arquitectónico sabiendo que esta articulación vertical está mucho más condicionada.
¿Hasta qué punto es vinculante legalmente la creación de edificios fácilmente accesibles?
Totalmente. El obligado cumplimiento de la normativa actual implica la correcta resolución de la accesibilidad universal en edificios de obra nueva. En cuanto a las reformas, la discrecionalidad de la legislación foral confiere a las autoridades municipales la potestad de exigir su cumplimiento íntegro en todo caso.
¿Sería exigible el derecho por parte de las personas discapacitadas la accesibilidad a cualquier lugar público?
Entendemos que sí, que en términos generales la igualdad y la no discriminación debería posibilitar esta accesibilidad universal. Al mismo tiempo, hay que ser conscientes que muchas grandes obras de arquitectura de la historia, con los presupuestos de hoy en día nunca hubieran sido posibles. Tampoco lo es su adaptación en la actualidad. Esto implica y supone, en todo caso, un reto para los arquitectos.
A pesar del parón laboral que muchos sectores sienten, en el caso concreto de la Arquitectura, ¿es la rehabilitación de viviendas una de las alternativas que oxigenan el ámbito?
Actualmente sí, pero se debe casi exclusivamente a las ayudas y subvenciones públicas. La valoración del nivel de deterioro de las viviendas al objeto de contemplar la realización de una rehabilitación depende de la coyuntura económica. En situaciones adversas las reformas y rehabilitaciones casi siempre se pueden aplazar.
Fuente | Diario de Navarra
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