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Fredy Massad | ABC, 2011-01-02
Una reflexión crítica acerca el monumental proyecto de la Ciudad de la Cultura de Santiago de Compostela supone integrar dos puntos de partida divergentes: por un lado, la desaforada carrera emprendida por muchas ciudades españolas para proveerse de edificios emblemáticos firmados por arquitectos de renombre en la estela del «efecto Bilbao»; y, por otro, cómo este proyecto supuso la oportunidad clave para materializar un manifiesto conceptual de uno de los mayores y consistentes teóricos de la arquitectura de finales del siglo XX, Peter Eisenman.