Imagen: El País |
El proyectista navarro indaga en una arquitectura más expresiva y resolutiva. Su autor lleva casi una década trabajando en este auditorio.
Anatxu Zabalbeascoa | El País, 2011-06-01
El sol del Mediterráneo ha alterado el sobrio hacer de Patxi Mangado. Su nuevo auditorio de Teulada (Alicante) tuerce sus líneas de hormigón para dejar pasar la luz y esquivar el calor del sol.
El resultado es una arquitectura concebida como una gruta "que libra del azote del sol" y una geometría compleja "que permite conservar las vistas sobre el mar". El edificio se percibe así con dos lecturas. La exterior es sobria y dibuja el inmueble como un faro horizontal, una gran caja que anuncia, en el punto más alto de la nueva Teulada, que todo el valle de edificaciones blancas que llegan hasta el mar tiene un nuevo auditorio. Mangado habla de "auditorio regional para 60.000 usuarios en invierno y 120.000 en verano". La lectura interior se adivina en la complejidad no del volumen, pero sí de la fachada, que busca recordar las aristas de un diamante. Ese zigzag no es caprichoso. Trata de lidiar con el sol de la manera más sostenible posible: procurando forzar sombras y evitando la oscuridad.