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| Imagen: El País |
Una arquitecta guipuzcoana ha participado en el proyecto del nuevo bar del chef Ferrán Adriá en Barcelona
Aitor Anuncibay | Noticias de Gipuzkoa, 2011-03-20
"Necesitamos un equipo multidisciplinar, joven y lo suficientemente loco para afrontar la tarea. Y, por favor, nadie minimalista". Estas son las condiciones que el cocinero Ferrán Adriá puso como condición al arquitecto alemán Oliver Franz en mayo del año pasado para diseñar su nuevo proyecto: un local dedicado a las tapas y los snacks y cócteles en la avenida del Paralelo de Barcelona y abierto hace tres semanas.
El chef catalán, respaldado por su hermano Albert y otros tres socios, lanza los interrogantes sobre los que desea apoyar el fondo y la forma de su local, denominado Tickets para la zona de pintxos y 41º para la coctelería. "¿Qué es un bar de tapas? ¿Qué significa tapear? ¿Qué significa estar en el Paralelo, en Barcelona, en el Mediterráneo, en España? ¿Cómo introducir la idea de diversión, de experiencia, de sorpresa, en definitiva, de juerga?".
Y es aquí donde entra en juego la arquitecta de Arrasate Natali Canas, especializada en interiores, exposiciones, escenografías, vídeo y fotografía, con trabajos realizados en Nueva York, Berlín y Barcelona.
La guipuzcoana, de 35 años, recibió la llamada de Franz, a quien también se unió el diseñador gráfico Dani Rubio.
Para Canas comenzaba, así, una intensa aventura profesional gracias a su espíritu joven, multidisciplinar y lo suficientemente loco. "Adriá no quería nada que se acercara a esa idea de restaurantes que han abierto en todas las ciudades y se parecen unos a otros, minimalistas, blancos y aburridos. Tenía claro desde el principio que, debía tener varias barras, con cocinas abiertas y una oferta gastronómica diferente en cada una de ellas", recuerda la arrasatearra, que cuenta con un estudio de arquitectura, Canas+Echeveste.
Maquetas: Teatro
Se inició un proceso que se ha bamboleado día tras día por el empuje creativo del equipo y las ideas de los propietarios del negocio. "Los primeros meses ocurrió una cosa que, normalmente, no suele pasar en estos proyectos. Adriá quería construir las maquetas a tamaño real. Entonces, trajeron tableros y cartón e íbamos montando la distribución del local, modificando sobre la marcha. Al final, llegamos a un punto que a todos nos convencía. Es un proceso poco habitual, y que ellos participaran es importante", detalla Canas.
El objetivo era conseguir una distribución y aspecto inspirado en una feria, sin obviar el enclave barcelonés en el que se halla. "Queríamos que el cliente viva una experiencia nueva en cada barra. El bar está situado en la avenida del Paralelo, que es donde hay varios teatros. Y, por eso, querían hablar de ese ambiente. Buscaba conseguir escenografías y la sensación de que el bar pudiera ir cambiando en el tiempo", resalta la arquitecta de Arrasate.
Las semanas para yuxtaponer y modelar las aportaciones de cada uno transcurrieron bajo una tormenta de ideas, fomentada por el propio restaurador. "Adriá decía que no quería un espacio diseñado. Pero, ¿cómo diseñas un espacio que no lo parezca? Es como una incongruencia. Buscaba un espacio más espontáneo, pero detrás de eso hay diseño y pensamiento", señala Canas.
Tras un "proceso difícil y complejo, todo fue sobre ruedas". "Hicimos muchas propuestas e íbamos cambiando. Adriá exigía mucha creatividad, quería que le liásemos. Le llevábamos cinco ideas y en la reunión surgía otra más. Ellos trabajan así en la cocina, aunque en arquitectura no lo hacemos tanto. Se han mezclado los dos procesos creativos", pormenoriza la diseñadora vasca.
Barroco: Fiesta
Finalmente, el resultado. Tickets es un espacio "barroco, informal, colorido, canalla, formado por varias barras, a modo de quioscos temporales dentro de una feria". Una zona está inspirada en el mar Mediterráneo, "sus colores azulados, su superficie ondulada, el brillo especial de su luz, la Barceloneta, su caos, el frescor y color de sus terrazas".
Otro lado se relaciona con la ciudad de Barcelona, "su alboroto, su fiesta, el Paralelo, sus espectáculos, la noche, la feria. Y entre las dos, presidiendo la entrada, El Camarote, la zona más canalla del bar, un faro, un punto de encuentro.
La coctelería 41º se ofrece como un "backstage detrás del telón, el plató, un espacio industrial con restos de escenografías, mobiliario y bobinas de películas abandonadas en algún antiguo rodaje", todo ello arropado por "la calidez de sus alfombras, sus sillones, su ambiente". Este espacio pivota sobre "una monumental barra tipográfica que aúna arquitectura, grafismo, escultura y tecnología industrial".
Fuente
Cocinera del diseño
Una arquitecta guipuzcoana ha participado en el proyecto del nuevo bar del chef Ferrán Adriá en Barcelona
Aitor Anuncibay | Noticias de Gipuzkoa, 2011-03-20
Y además...
Barcelona removida, no agitada
Un mojito con azúcar de vainilla y chocolate. En ruta por los bares preferidos del coctelero Javier Caballero, creador del 'gin tonic' molecular.
Antía Casedo | El Viajero | El País, 2011-03-19
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